sábado, 27 de julio de 2019

El nacimiento de la Bande Dessinée


A finales del siglo XIX, en Estados Unidos habían creído erróneamente que inventaban una forma novedosa de narrar a través de imágenes y que llamaron comic. A comienzos del siglo XX desarrollaron esa forma narrativa hasta perfeccionar un lenguaje que creían nuevo. Luego, como la pólvora, ese nuevo lenguaje se expandió hacia el sur, llegando al Cabo de Hornos, donde quedó detenida, ya que entonces, como ahora, la Antártida estaba despoblada.

Stampa D’Epinal, por Ch. Pellerin, hacia 1885. Musée Carnavales, París

Sin embargo, Europa fue reticente a importar este “invento” yanqui y, a comienzos del siglo XX, no hizo sino continuar con su tradición de narrativa a base de imágenes, desarrollada en los siglos precedentes, viviendo ajena a las codificaciones que se van consolidando al otro lado del Atlántico.

Une Voix de Tonnerre, Caran D’Ache, 1887. Le Figaro Illustré

Esta circunstancia fue la generadora de un área confusa donde fácilmente se traspasaban las fronteras entre la Narrativa Gráfica y la Literatura ilustrada, es decir, a pesar de utilizar el lenguaje preciso, no eran conscientes de que lo era y lo confundían con otras cosas. Así insertaban los textos a pie de dibujo con lo que, en ocasiones, resultaban redundantes, por repetir lo que contaban los dibujos. Pero estos textos contenían muchas veces, además de las descripciones, los diálogos de los personajes, por lo que eran un complemento a los dibujos, los cuales llevaban el peso narrativo.

La familla Fenouillard, Cristophe, 1889. Le Petit Français Illustré

Voy a realizar un resumen del desarrollo inicial de la Bande Dessinée, que es una de las más importantes tradiciones de narraciones con imágenes del continente y que también hace alusión Bélgica, de la cual hablaré en una próxima entrada de mi blog.

En Francia, editores como Offenstad publicaban revistas juveniles con historias en imágenes que tenían los textos al pie: L'Epatant (1908), Fillette (1909), L'Intrépide (1910), Cri-Cri (1911), Les Romans de la Jeneusse (1912) y durante la Primera Guerra Mundial: Croix d'Honneur y La Jeune France.

De esta primera época francesa cabe destacar algún autor. Louis Forton (1879-1934) creó en 1908 la famosa serie Les Pieds Nickelés, para la revista L'Epatant, que cuenta las aventuras de una banda de tres granujas. Alain Saint-Ogan (1895-1974), en 1925 crea Zig et Puce, en Le Dimanche Illustré, siendo el único en utilizar las técnicas desarrolladas al otro lado del Atlántico. René Pellarin, Pellos, (1900-1998) en 1937 dibujó su fantástica Futuropolis y en 1948 continuaría la  serie mencionada de Fortón, Les Pieds Nickelés, hasta 1981, sabiendo darle vida nueva, con una narración mucho más ágil y los personajes actualizados. Benjamin Rabier (1869-1939), realizará en Europa otro invento que los yanquis consideran “genuinamente americano” los funny animals con su serie Gedeon (1923). Pero claro, cometió el error “imperdonable” de colocar los diálogos en textos impresos al pie de los dibujos. Y por fin Rober Velter (1909-1991) conocido como Rob-Vel es el creador en 1938 de la famosa serie Spirou en Bélgica.

Sería el editor Paul Winkler, el que revolucionaría la industria francesa publicando material de Estados Unidos en los años 30. Obras  como Jungle Jim, Prince Valiant, Little Annie, The Katzenjammer kids (rebautizados como Pim, Pam, Poum) o Mickey (también con el nombre cambiado de Rooney). Estas importaciones causaron tal impacto en los creadores que, entonces sí, abandonaron definitivamente la tradición y comenzaron a narrar, a hacer historietas, utilizando los bocadillos. El material americano acaparó la industria, relegando a los dibujantes franceses. Durante la Segunda Guerra Mundial este material extranjero escaseó, pero fueron pocas las oportunidades que se dio a los autóctonos ya que desaparecieron muchas revistas por la catástrofe bélica y las que quedaban disminuyeron el número de páginas. Cuando acabó el conflicto, los vacíos se llenaron con material belga de las revistas Tintin y Spirou, apareciendo también las primeras revistas procedentes de Italia.

Una vez asentado el lenguaje pleno, con los avances importados de Estados Unidos, Francia se convertiría en origen de una de las expresiones más brillantes de la narrativa gráfica a nivel mundial. En los años se pone a la cabeza de las revistas con una cabecera hoy mítica, Pilote, que nació en 1959 de la mano de Jean Hébrard, René Goscinny, Albert Uderzo y Jean-Michel Charlier. La revista se dirigía a los adolescentes, el mismo sector de las exitosas belgas Spirou y Tintin. Pronto el semanario sería comprado por Georges Dargaud. Sus historias eran principalmente aventuras: Barbe Rouge, Astérix, Tanguy et Laverdure, Blueberry, Lucky Luke... alcanzando el éxito hasta las sacudidas de mayo de 1968. De todos ellos espero hablar en capítulos posteriores.



BIBLIOGRAFÍA:
- Coma, Javier. HISTORIA DE LOS CÓMICS (4 tomos). Toutain Editor, Barcelona, 1982.
- Gaumer, Patrick y Moliterni, Claude. DICCIONARIO DEL CÓMIC, ILUSTRADO, Larousse Planeta, S.A. Barcelona, 1996.
- Guiral, Antoni. DEL TEBEO AL MANGA. UNA HISTORIA DE LOS CÓMICS (10 tomos), Panini Comics, Barcelona, 2007-1013.

domingo, 14 de julio de 2019

Oración blasfema


En mi anterior entrada de este blog subí uno de mis poemas. Y lo hice a palo seco, el poema y nada más. Que cada uno lo interprete como le plazca y que le guste o lo desprecie. Eso es la poesía, una apelación directa al lector, que no necesita explicaciones.

Hoy me propongo subir otro de mis poemas, pero no me atrevo a hacerlo sin una previa justificación. Intentaré explicarme con el menor número de palabras que pueda.


La fe es un acto volitivo, es decir, depende de la voluntad. En el fondo se cree en lo que se quiere creer o no se cree porque no se quiere. Siempre podemos inventar coartadas que apoyen nuestras creencias. No existe ciencia objetiva que explique ninguna de las religiones. Por tanto, la única manera de entendernos en sociedad es respetar la fe de los demás, mientras esta no interfiera en la libertad ajena. En tal sentido los agnósticos y los ateos debemos respetar las procesiones de Semana Santa o el Ramadán como expresiones que están enraizadas en unas creencias voluntarias, pero que son importantes para sus practicantes. Aunque nunca respetaremos la ablación del clítoris o la imposición de credos, porque atentan contra la libertad individual y dañan la integridad de las personas.

Yo leo poesía religiosa y la respeto, al máximo. Y me gusta, porque me ayuda a reflexionar sobre mi propia espiritualidad. La espiritualidad de un agnóstico, que antes fue creyente. Soy consciente de que soy agnóstico, que no significa más que ignorante, el que no sabe. No me atrevo a ser ateo —el que niega a Dios— por esa misma ignorancia, para no negar lo que desconozco. Esa es mi opción, reflexionada con la lucidez de la que soy capaz.

Al igual que yo respeto las creencias de los demás, tanto en Dios como en su negación, pido, solicito, exijo que se respete mi posición al respecto. El siguiente poema, que surge de lo más profundo de mis convicciones, puede parecer una afrenta a las gentes creyentes, pero esa no es mi intención. Ni siquiera va contra la fe, sino contra un cierto tipo de religiosidad, superficial y dañina, incluso para el que la practica.

Estoy seguro de que a ningún creyente respetuoso le ofenderá mi poema. No obstante, ese es el miedo, encontrarme con ofendiditos, especie animal, que no racional, que últimamente prolifera por doquier.

Por tanto, ruego a los que ya de por sí pueda molestar el título, que no lean el poema. Espero que el resto, los librepensadores, me respeten.


Oración blasfema

Padre nuestro, que nos regalas la vida
y en cuanto aflora el goce de la carne
nos castigas con el peso del pecado,
hemos nacido de la arbitrariedad de tu deseo,
teniendo que enfrentarnos al vivir cotidiano,
para ser conscientes de nuestro espantoso fin.

De tu santa sabiduría obtenemos tus dones.
Nos confieres dolores de cabeza y de estómago,
nos das muelas que se pudren y que hieden,
nos proporcionas miembros que se gangrenan,
y no les libras de ello ni a los pobres ciegos,
ni a los que son sordos por tu propia voluntad.

Permites que nazcan niños deformes.
Matas en la carretera a jóvenes sanos,
hijos de familias impías o creyentes.
Atormentas con hambre a los recién nacidos,
contagias enfermedades a los adolescentes,
y dejas en el paro a los padres de familia.

Eres el rey de los terremotos y las inundaciones.
El que exige guerras en su nombre.
El que persigue herejes y tortura impíos.
Eres un perverso asesino de masas
y tus crímenes se encuentran relatados
a lo largo del Antiguo Testamento.

No llegamos a comprender tu plan divino,
ni el sentido de este Valle de Lágrimas.
Como dios te han creado los devotos,
a nuestra imagen y semejanza,
y con valor te negamos los ateos,
sumergidos en bendito desamparo.

Amén

domingo, 30 de junio de 2019

Vivir para soñar

Dormido o despierto
no paro de soñar.

Estoy hecho de plumas
y me dejo llevar
por la brisa, por el aire,
por el puro azar,
que traza mi destino,
al que quiero llegar
sin parar de soñar.

El cielo infinito
y el ansia de volar,
de fundirme en el azul,
de licuarme en el mar,
atrapar el horizonte
con el continuo navegar.
Y no dejar de soñar.

Voy a favor de corriente, 
me dejo arrastrar.
La dulce marea me lleva
a las costas de ultramar.
Y, estático, indolente,
no me quiero rebelar,
no quiero dejar de soñar.

La vida la paso en sueños,
pues el duro despertar
aterra mi consciencia
y comienzo a llorar.
Despertar a la vida
no es más que acabar.
Es terminar de soñar.

Por eso quiero dormir,
no me quiero desvelar.
Por siempre quiero soñar.


sábado, 15 de junio de 2019

El trance


Estaba acostumbrado a controlarlo todo. Incluso en su trabajo. Hay a quienes lo de actor porno no les parece un trabajo, pero lo es. El actor es eso, alguien que actúa, que finge. Un rodaje porno no trae placer a ninguno de los que participan en él, ya que tienen que inhibir sus deseos y plegarse a posturas incómodas, con el solo objetivo de que sean más efectivas en la pantalla. Él tenía la total seguridad de que lo suyo era un trabajo. Para muchos, una película porno no es más que una puesta en escena del mal gusto, pero ese es otro tema.

Aunque el director le hiciera indicaciones, él tenía que controlar la postura, la intensidad e incluso la iluminación, nada podía fallar, para no alargar el rodaje. A fin de cuentas en este negocio se cobra por sesiones y una película puede estar acabada en una sola tarde. Alargar cualquier sesión, sería perder el tiempo y el dinero.

En su vida cotidiana también tenía que controlar todos los factores, el orden era primordial. Seguía a rajatabla la agenda que guardaba en el teléfono y si algo no estaba apuntado no existía, simplemente.

Porque estaba apuntado y porque era la hora, se presentó en la consulta del dentista. Nunca antes había ido al dentista, así que entró en el terreno de lo desconocido, de la aventura, de lo que se escapaba a su control. No sabía qué es lo que le esperaba, no sabía si sentiría dolor, no sabía cuánto le iba a costar aquel atentado contra su integridad física. El caos se personificaba detrás de esa puerta. Aún así, entró, porque lo tenía apuntado en su agenda.

—Si no puede atenderme en estos momentos —le dijo a la enfermera—, no me quedaré, pues dentro de una hora tengo una cita importante.

—Descuide —respondió ella—, hoy no llevamos retraso. Antes de lo que espera estará libre.

Aquello le tranquilizó. La cosa iba bien.

Imagen de StockSnap en Pixabay

Sin embargo, los sillones giratorios y todo ese instrumental que colgaba de cables le descolocaron. La lámpara sobre su cara le ruborizó. La falda corta de la dentista y su escote, cuando se agachó a pincharle la anestesia, fueron la última imagen antes de que se sintiera flotando en el espacio. Más tarde se enteraría de que la dosis había sido excesiva, pero en esos instantes, difíciles de cronometrar, se sintió fuera de lugar. Flotaba entre ensoñaciones. Se vio a sí mismo trabajando en lo suyo, con una partenaire ligera de ropa que provocaba su erección, la cual surgió profesionalmente, como cabía esperar. Se vio desnudándola y, contrariado, encontró más resistencia de la habitual; serían cosas del guión, sin duda. Además de la caliente doctora, se unió a la lucha carnal la sensual enfermera. La sensación de estar rodando una película porno debió ser la causa esa humedad en el pantalón, que notó cuando despertó del ofuscamiento.

—Y no vuelva nunca más a esta consulta —le dijo la enojada enfermera, cuando lo acompañó a la puerta—. Ni se preocupe por la factura, no le cobraremos con tal de no volver a verlo por aquí.

viernes, 31 de mayo de 2019

La vida de Ismael

La vida de Ismael estaba ligada a la de Boris, tanto si lo dejaba marchar como si lo mataba. El problema era que en esos momentos no tenía claro qué era lo más conveniente, pero le urgía tomar una decisión.

Ismael estaba enfermo, consumido por la fiebre. Tenía la certeza de que la causa era la herida producida en la pierna al caer del caballo, que se le había infectado. Si no moría de esta, la maldita guerra acabaría por volverlo loco.

Se había adentrado con Boris en territorio enemigo, como avanzadilla, para informar de la disposición de las tropas. Pero una loca carrera, tratando de ocultarse de la caballería de esos canallas, provocó que el caballo en el que iban ambos se despeñara y acabara en el fondo del barranco. Por suerte, Ismael pudo quedarse al borde del precipicio, junto a Boris, al que llevaba atado con una cuerda, por lo que no pudo huir a pesar del percance.

Se habían quedado solos, ocultos en un paraje arbolado. Ismael aún dominaba la situación, por mucho que la caída le hubiera quebrado la pierna derecha y tal vez la cadera, ya que no podía levantarse del suelo. Aún así, le resultó fácil retener a Boris. Lo peor era el dolor. A pesar de que era constante, conseguía mantenerlo silenciado por la rutina de soportarlo, pero se le hizo patente cuando una mueca macabra le tensó todos los músculos de la cara.


Hacía casi una semana que no comía, ya que las provisiones se despeñaron con el caballo y la debilidad era responsable del ensañamiento de la fiebre. Como no arrancase hierba, no tenía otra cosa a mano. Menos mal que las lluvias, no demasiado intensas, le permitieron saciar la sed.

Sin embargo, Boris parecía fuerte, por tanto, podría enviarlo en busca de ayuda con una nota, pero, con ello, Ismael no tenía ninguna seguridad de lograr que su escuadrón viniese a rescatarlo. No le cabía duda de que Boris podría cruzar las líneas de nuevo, lo que no le ofrecía ninguna confianza era que luego pudieran encontrarlo donde estaba.

La otra opción sería matarlo. A fin de cuentas, no se tenían ninguna simpatía y alimentarse con su carne podría prolongarle un poco la vida, aumentando la esperanza de que fuera encontrado en el avance de las tropas aliadas, que ya no debían estar muy lejos. Si no decidía rápido, sería el destino quien decidiese por él.

¿Cuánto podría durar sin probar bocado?, se preguntaba Ismael. ¿Cuánto tiempo le daría de margen el comerse a su compañero de viaje? Desde luego que era algo que no podría consultar con Boris.

La guerra le había endurecido tanto que no le causaba ningún remordimiento acabar con su acompañante. Haciendo acopio de toda su energía, mató a Boris sin piedad. Lo tenía a su alcance y le retorció el cuello. A fin de cuentas, Boris no era más que un palomo mensajero.

martes, 14 de mayo de 2019

A quién vas a votar


—¿A quién vais a votar en las próximas elecciones? —preguntó la profesora a sus alumnos adolescentes.
—Pero es ilegal, profe —respondió uno de ellos—, no se puede pedir a nadie que diga a quién va a votar.

—Lo que es ilegal —indicó la aludida— es obligar a alguien a decirlo, si no es su voluntad. Pero vosotros aún no tenéis edad para votar y esto tan solo es un ejercicio. Un juego. Desde luego que no estáis obligados a responder sinceramente, ni siquiera a responder, pero me gustaría que lo hicierais, para sacar conclusiones importantes.

—Pues yo no pienso votar —dijo una chica rubia, que se sentaba en las últimas filas—, no soy política, ni me interesan esas cosas.

—Estás equivocada, no cabe la posibilidad de no ser político, al igual que no cabe la posibilidad de bañarse y no mojarse.

—Y tanto que cabe la posibilidad, como que no lo soy, aunque usted se empeñe.

—¿Tus padres te dan alguna paga de forma periódica para tus gastos?

—Sí, menos de lo que necesito.

—Bien, a partir de ahora me vas a traer a mí ese dinero y yo decidiré en qué te lo gastas. Verás cómo yo lograré que te sobre. Además, me quedaré una parte, para retribuir mi trabajo de administradora.

—Ni de coña.

—¿Ves como eres política? En eso consiste precisamente la política, en administrar el dinero y decidir en qué se gasta. Todos tenemos una idea y un deseo de qué queremos que se haga con nuestro dinero y si no votamos a las personas que piensan igual que nosotros y tienen nuestros mismos intereses, entonces ganarán los que defienden los intereses de otros. Serán estos quiénes decidan cuánto y en qué se gastará el dinero común. Por tanto, tan política es la decisión de no votar, a la que tienes derecho, como la de votar. En ambos casos estás decidiendo qué van a hacer otros con tu dinero.

—Pues yo me bañé una vez con un traje de neopreno —dijo otro de los chicos— y no me mojé —hubo un coro de risas. Eran adolescentes.

martes, 30 de abril de 2019

Ávila tenebrosa


No, no es una adjetivación de mi ciudad sino el título del último libro colaborativo que hemos sacado en la Asociación la Sombra del Ciprés, donde el tema de lo oscuro, el miedo, el terror o el simple humor negro nos cautivó, dando como resultado un libro ameno, entretenido y, como suele decirse, que no dejará a nadie indiferente.

Son 27 relatos, muy diferentes entre sí, aunque compartan temática. Por fuerza, la reseña habrá de ser breve, a pesar de lo cual espero con ella incentivar el interés.

“Quizás hayas escuchado antes de venir aquí (a Ávila) una frase que, de tan repetida casi ha perdido su concepto… En Ávila solo se escucha el silencio. Y te aseguro que es aterrador”, dice Nieves Mories en un excelente prólogo que sirve de aperitivo a un suculento menú de desasosiego.

1.- Comienza el libro con un TRAYECTO ANGUSTIOSO, relatado por Eliezer Bordallo, que nos lleva de viaje por carreteras precarias de los años sesenta del siglo veinte, en dirección a nuestra ciudad con una gran nevada, oscuridad y acontecimientos inquietantes.

2.- Prosigo yo, hablando de algo turbador ocurrido en un torreón de nuestra muralla. ¿Te va a dar miedo la peculiar niña que allí se aparece? Tendrás que comprobarlo leyendo LA NIÑA DEL TORREÓN 88.

3.- El inefable Ánzoni Martín te va a contar la vida, obra y milagros de un exorcista peculiar, Lucio Fernando. El miedo en este caso irá acompasado con su enorme sentido del humor: NOISE  SOPA POSESIÓN (claro, el título no podía ser otra cosa de un palíndromo).

4.- A continuación, Begoña Ruiz Hernández nos hará viajar al siglo XVI para conocer a Leví y su relación con un siniestro personaje que habitó nuestras calles, fray Tomás de Torquemada, en LA PUERTA DE LA MALAVENTURA.

5.- OS SEGUIRÉ OBSERVANDO, nos dice Lorena Rodríguez Herrero, pero ¿quién es el que nos observa? Pues alguien que permanece muy quieto, menos cuando se mueve. Y no suele ser para bien.

6.- Pablo Garcinuño, y su NIÑO RATA, te va a sorprender de verdad. Excelente texto e inquietante historia de un peculiar embarazo.

7.- Sonsoles Pindado nos llevará a la CALLE DE LA VIDA Y LA MUERTE, donde caballeros de otros tiempos siguen enzarzados en una pelea épica. Son historias pasadas que hoy aún resuenan en nuestros adoquines.

8.- Y SIN ALIENTO te vas a quedar siguiendo a los corredores de Guillermo Buenadicha. Puedes hacer caso a sus consejos si quieres preparar una maratón, pero no vayas a correr de noche cerca del pabellón Carlos Sastre. Algún que otro ráner se va a ver retratado.

9.- CRACK es una onomatopeya, pero no quieras saber, o sí, a qué se debe. Un vigilante jurado, un edificio histórico vacío por la noche, mucha tranquilidad y “crack”. María Ripoll te pondrá los pelos de punta.

10.- Tomás Salinero Sánchez nos trae una original historia, EL POZO, que rememora tiempos pasados y actuales y está en la tradición de los mejores cuentos. Eso sí, en este caso de miedo.

11.- La CALLE DE LA MALDEGOLLADA ya no está en nuestro callejero, pero existió y tiene una historia oculta, que el gran poeta Julio Collado nos va a contar con un extraordinario romance.

12.- CARTA A UN CORINTIO DE ALBACETE, LLAMADO DON AGUELOS; DESDE UNA CALLE DE ÁVILA, LLAMADA CABALLEROS. Este, ni más ni menos, es el título de la desternillante historia en la que Ángeles Jiménez Soria nos relata el hallazgo de cierto resto cadavérico del poeta que vivió en nuestras calles, llamado Gustavo Adolfo Bécquer.

13.- ¿Es posible el CONTACTO con los seres descarnados? Carlos del Solo nos contará algo que nos puede poner los pelos de punta. Su escabrosa historia te dejará estremecido.

14.- José Peñalver aborda otro tipo de contacto con seres descarnados, en los que es necesario un intermediario. Si todavía no has pasado miedo, espera a leer LA SEPARACIÓN.

15.- La lírica también está presente en nuestro libro, pero aliñada con fantasmas. Belleza y miedo, ¿quién dijo que no? José Antonio García de la Concepción y LA NIÑA BRUJA te pondrán los pelos de punta.

16.- Y a continuación una historia épica, pero llena de terror, MUERTOS SOBRE VAGONES, estación de tren, viajes entre este mundo y el otro. Impresionante el relato de César Díez Serrano.

17.- Otra historia escabrosa nos trae Óscar de Blas con su PACIENTE 236. Excelente relato de personajes que no saben si están obrando bien o mal. Tú obrarás bien leyéndolo.

18.- ¿La realidad es real o es una creación de nuestra mente? No te asustes, pero vas a pasar miedo con la historia que nos cuenta Nelly Shadows, EL ETERNO DESPERTAR.

19.- ¿Quién no tiene ASUNTOS PENDIENTES? Mucho cuidado si los tienes, lo que parece cotidiano puede relevarse peligroso. Así nos lo narra de manera excepcional Antonio García Palacios.

20.- DESPUÉS DE LA NEVADA suele haber barro e incomodidad. Pero mejor así, a que ocurra lo que nos cuenta, con un texto precioso, Juan Pedro Fernández Blanco. ¿Y qué tiene que ver con ello don Guido Caprotti? Pues tendrás que leerlo.

21.- Unos muchachos, una excursión campestre alrededor de Solosancho para comerse unos hornazos el Domingo de Resurrección, ¿qué podría salir mal? Pues algo pasó para tener PÁNICO EN ULACA. El magnífico Moisés González acudirá a recuerdos de su infancia para asustarnos.

22.- José Manuel Blázquez Alonso te contará algo que es difícil de creer, pero más vale que lo tomes en serio. LA LIMPIEZA que hará será antológica, pero no descabellada.

23.- LA NEVADA de Óscar Hernández es diferente a las otras nevadas. ¿Acaso es ciencia ficción? En todo caso es un relato apocalíptico que te pondrá los pelos de punta y te dará que pensar.

24.- UN RATÓN DE BIBLIOTECA es un cuento en el que Begoña Jiménez Canales recurre a su experiencia e imaginación, para llevarnos por cuartos oscuros y lugares deshabitados ¿del todo?

25.- Alberto Martín del Pozo nos habla sobre  LA LUZ Y TUS SOMBRAS. ¿Es posible la maldad en el ser humano? A veces la crueldad surge de manera cotidiana, cuando quién la practica no tiene límites morales.

26.- Toño García se adentra en los celos entre hermanos, hasta llegar al límite de la obsesión. ESTOY AQUÍ, es un relato sorprendente y con el que de alguna u otra forma podemos sentirnos identificados.

27.- Cierra el libro una pequeña joya, LUNA DE SANGRE, de Carlos Alameda, que mezcla historias reales, una trágica inundación, con otras que ¿no son reales? Tal vez sí.

Y, si no te has asustado bastante, no te pierdas las excelentes ilustraciones de portada y contraportada de la enorme artista gráfica Gris Medina, que están a la altura, al menos, del contenido del libro.